10/12/2011

“El Estado mexicano es culpable de crímenes de lesa humanidad contra su población”

Amalia Rivera
Estados Unidos aprendió bien la lección: sabe que no puede ganar ninguna guerra en ninguna parte del mundo, y que ha perdido su patio trasero más cercano, México, el cual es un Estado de derecho fallido que avanza rápidamente hacia la colombianización, y uno de los pocos Estados que aún permiten a EU imponer una nueva ofensiva imperialista para defender sus intereses económicos y geopolíticos en la región. Así lo asegura el internacionalista James D. Cockcroft, fundador de la Coordinadora Internacional de Redes en Defensa de la Humanidad, quien se define orgullosamente como un “gringo antigringo”.
Cockcroft es un apasionado de México que ha dedicado muchos años de su vida a investigar y rescatar “la historia robada por las clases dominantes de ambos países”, según explica. A mediados de los años sesenta difundió en importantes revistas estadunidenses las dificultades económicas que sufrían los mexicanos del valle de Mexicali a causa de la salinidad del río Colorado, con quienes luchó brazo con brazo. Fue defensor de presos políticos en Lecumberri tras la matanza del 2 de octubre de 1968, año en que publica Precursores intelectuales de la Revolución Mexicana, obra que devela la historia escondida de los magonistas y que se ha convertido en libro de texto de muchos profesores y va por su vigesimoquinta edición. La compenetración en la lucha de los de abajo lo llevó a internarse por la senda de las luchas obreras y de los migrantes en su país, y a ser el respetado internacionalista que es hoy.
Además de especialista en temas sobre México, América Latina y el imperialismo, es un escritor prolífico que ha escrito cuarenta y cinco libros, pero también un “poeta maduro que ha acumulado muchas juventudes” y que ha vivido muchas muertes de seres queridos cuya sola mención desata el llanto de este hombre sensible, pero implacable en la defensa de los derechos de los oprimidos.
El bicentenario de la Revolución Mexicana lo llevó a rescatar las enseñanzas del pensamiento y la lucha de Ricardo Flores Magón que vertió en su más reciente libro: Precursores intelectuales en el México del siglo XXI (Jorale Editores, 2010), donde realiza un recorrido relámpago por la historia de México a partir del cual establece un paralelismo entre la realidad nacional actual y la que antecedió a la Revolución de 1910.
La influencia y el pensamiento de Ricardo Flores Magón –explica entusiasmado– siguen en las grandes masas; es como un río secreto que corre en el subconsciente de los pueblos, no sólo en Baja California, Sonora, sino en todas partes. Los jóvenes presos tras la matanza del 2 de octubre del 68 respondieron a los reporteros: “Nuestros guías no son otros que los Flores Magón y Ernesto Che Guevara.”
Para el autor, Flores Magón es “la figura social más inteligente e importante de la historia de México, más aún que Benito Juárez”, porque asimila toda esa corriente de abajo, revolucionaria, ésa que no tolera el Estado y por eso lo esconde en la historia oficial y lo desaparece de los libros de texto.
“Es una figura de talla mundial, en muchos sentidos más grande que José Martí, quien es un gran maestro por su humanismo. Flores Magón se anticipó en ideas revolucionarias a figuras tan famosas como Lenin, Trotsky y Rosa Luxemburgo por sus planteamientos sobre el internacionalismo y el imperialismo, la reforma agraria y la opresión y subordinación de la mujer.”

Las voces de los "Inadaptados"

 Luis Aguilar
Cuando recibí la llamada telefónica de una radio en Miami, la coordinadora de un programa me dijo: "Queremos que nos ofrezca un comentario sobre los inadaptados que están protestando en Wall Street". Esta fue la tercera llamada de una radio que, como Editor del semanario La Tribuna Hispana USA, recibí (las dos anteriores fueron desde Argentina) después de haber escrito un par de artículos de análisis sobre el movimiento "A Ocupar Wall Street". Yo accedí a la entrevista, que se realizaría unos días después, pero me quede pensando: Por qué esta persona –así como muchos medios de comunicación– llaman "inadaptados" a los que se han unido al movimiento "A Ocupar Wall Street". Desde un punto de vista, este adjetivo calificativo es correcto. Sí, los que están allí son unos inadaptados. Pero, desde otro enfoque, ellos NO son unos inadaptados sociales o hippies revoltosos anti capitalistas, como varios medios de comunicación los llaman despectivamente. Ellos son gente del pueblo, el 99%, que NO se quieren ADAPTAR al futuro que les está imponiendo la clase dominante, los verdaderos dueños del poder: el 1% de la población. Ellos NO se quieren ADAPTAR a vivir endeudados toda su vida con los préstamos estudiantiles forzados a obtener para lograr un grado universitario o endeudados con tarjetas de crédito virtualmente impagables por los voraces intereses bancarios –una variante, individualizada, de las deudas impagables de los países del Tercer Mundo–; NO se quieren ADAPTAR a la nueva economía de servicios donde solo hay empleos de bajos salarios, porque los empleos donde antes se ganaban bien han sido exportados al extranjero, a causa de la desindustrialización del país causada por la avaricia corporativa y los manipuladores de Wall Street.

NO se quieren ADAPTAR a tener que vivir en refugios o en cuartos alquilados porque la avaricia de las instituciones financieras –a pesar de las advertencias del FBI– causaron una burbuja inmobiliaria a través de procesos fraudulentos, lo que ha causado que millones de familias pierdan sus casas o estén en ese proceso; NO se quieren ADAPTAR a un futuro donde no puedan tener una independencia financiera y estén obligados a vivir en las casas de sus padres y postergar decisiones importantes en sus vidas porque, aun con un título universitario, sus perspectivas de ascenso social y económico, como la tuvieron sus abuelos y padres, virtualmente no existen. Por eso, y por muchas razones más, ellos NO se quieren ADAPTAR al nuevo sistema de esclavización financiera y explotación laboral, impuesto por los dueños del sistema-mundo capitalista. Y he aquí lo que algunos de los ocupantes Zuccotti Park, o la Plaza de la Libertad (donde está el campamento e improvisado cuartel general del movimiento Occupy Wall Street) expresaron en el reportaje "Who is occupying Wall Street? Not just your average Joe", de msnbc.msn.com.

10/04/2011

Fahrenheit 9 11 - subtitulado 1/13

y tu cuanto cuestas 10/10

y tu cuanto cuestas 9/10

y tu cuanto cuestas 8/10

y tu cuanto cuestas 7/10

y tu cuanto cuestas 6/10

y tu cuanto cuestas 5/10

y tu cuanto cuestas 4/10

y tu cuanto cuestas 3/10

y tu cuanto cuestas 2/10

y tu cuanto cuestas 1/10

Wall Street por asalto


Por Christian Papesch
NUEVA YORK, 30 sep (IPS) - El recoleto parque Zucotti del Bajo Manhattan supo ser lugar de relax para los financistas de Wall Street a la hora del almuerzo. Pero desde hace semanas es un campamento de cientos de manifestantes del movimiento Occupy Wall Street.
Desde el 17 de este mes manifestantes de todo Estados Unidos se suman al movimiento que cuestiona las injusticias del sistema capitalista y reclama más democracia y libertades individuales.

La base está instalada frente a Liberty Plaza, que supo ser el cuartel general de la Nasdaq (acrónimo de National Association of Securities Dealers Automated Quotation), la bolsa de valores electrónica, y donde funciona hoy la oficina de la corporación para el desarrollo del Bajo Manhattan, encargada de la reconstrucción de la zona devastada por el ataque del 11 de septiembre de 2001.

"Esto es un renacimiento democrático", dijo el martes 27 a varios periodistas el activista y profesor de la Universidad de Princeton, Cornel West, antes de dirigirse a unos 2.000 manifestantes que celebraban una asamblea general de Occupy Wall Street (Ocupemos Wall Street).

La convocatoria inicial de la protesta la hicieron en junio dos grupos de activistas sociales, hackers y artistas: Adbusters y Anonymous.

"Intentamos construir la comunidad y la cultura que quisiéramos ver en el mundo", explicó Isham Christie, estudiante de filosofía y de teoría del cine del centro de graduados de la City University of New York y uno de los organizadores de la manifestación. Para él se trata de una "lucha por un mundo más justo".

"La gente alienada de la sociedad de consumo o la que no tiene trabajo o no tiene vivienda… puede venir y recibir apoyo", dijo Christie a IPS. "Intentamos crear una alternativa a la sociedad capitalista, explotadora y opresiva en la que vivimos".

"Si la única verdadera guerra fuera la guerra a la pobreza, entonces pondríamos dinero en ella", decía un cartel que West alzó en la manifestación.

"Me gustaría que cambiara toda la estructura social, las ideas de capitalismo y distribución de la riqueza. Me gustaría ver un cambio hacia algo que honre realmente al verdadero pueblo", dijo a IPS otro manifestante, Gaye Ajoy, nacido en Turquía.

"Estoy en contra del uno por ciento de la población que es propietaria del país entero y no le importa nadie más", agregó.

Ajoy cree que los puntos de vista de sus compañeros se asemejan a las ideas del movimiento contracultural de 1960 y 1970 y de activistas como Martin Luther King Jr. O Gloria Steinam.

West apuntó a la diversidad de los presentes. "Es sublime ver todos los diversos colores, géneros y orientaciones sexuales, y todas las culturas diferentes en esta Liberty Plaza".

Un movimiento popular


Comparado con la estructura elitista de los bancos y empresas a los que confronta, Occupy Wall Street no tiene jerarquías. Todos pueden hablar y participar en las discusiones, y por tanto cualquiera puede asumir una responsabilidad o rechazarla.

Brian Phillips, de 25 años y consultor de Google del noroccidental estado de Washington, llegó a Nueva York hace unos días y ya es el director de comunicaciones de la protesta. Como muchos otros, renunció a su vida anterior para tomar parte en el movimiento.

"Era director comunitario en mi estado, manejaba un complejo de cuatro millones de dólares", dijo a IPS. "Renuncié a mi empleo, hice autoestop todo el camino para estar aquí y ayudar a esta gente".

La comunicación, interna y externa, es clave para estas protestas. Mediante sitios de Internet, cámaras web, Twitter y transmisiones en vivo, Occupy Wall Street se conecta con otros movimientos nacionales e internacionales.

"Es muy, muy importante que estemos conectados a Internet", explicó Phillips. "Necesitamos que el mundo vea y sepa lo que estamos haciendo".

"Porque transmitimos desde Occupy Wall Street, que es el cuartel general de la revolución, tenemos otras 10 ciudades que empiezan a estar ocupadas, por ejemplo Boston, Chicago, Los Angeles, Austin, Charlotte. Hay un montón de lugares sumándose. Se está haciendo grande y está creciendo más rápido de lo que esperábamos".

Occupy Wall Street también está atrayendo a medios locales e internacionales gracias al creciente apoyo de figuras conocidas, como el lingüista Noam Chomsky y el rapero Immortal Technique.

El hecho de que la policía neoyorquina arrestara a unas 80 personas en una marcha no autorizada hacia la sede de las Naciones Unidas también atrajo a los medios.

"Las empresas mediáticas, NBC, MSN, todas esas, no van a informar sobre nosotros, no van a decir la verdad", dijo el informático a IPS.

Conexiones mundiales


Alguien que quería saber lo que realmente pasaba en el parque Zucotti era Bettina Schröder, de la ciudad alemana de Colonia, que leyó sobre el movimiento en Internet estando de visita en Nueva York.

"Sabíamos que estaba pasando algo y vinimos", dijo. "Creíamos que era más pequeño, es bueno ver que hay bastante gente. Espero que sean más y más. Apenas está empezando".

Martin Peutsch, novio de Schröder, estaba especialmente satisfecho con el lugar elegido. "Wall Street es el sitio correcto. Muchos estadounidenses han sufrido mucho con la crisis bancaria", dijo a IPS.

"Es hora de movilizar la resistencia y mostrar a los bancos de Estados Unidos que no pueden hacer lo que quieran y seguir como si nada".

Schröder señaló también el aspecto internacional de este movimiento. "Hay muchos otros en tantos países diferentes. La gente está hablando, y es realmente bueno".

West comparó el "otoño estadounidense" con la Primavera Árabe y predijo que Occupy Wall Street tendrá larga vida, siempre que los manifestantes se mantengan firmes.

"Debemos sostener el impulso, porque es imposible traducir la cuestión de la codicia de Wall Street en uno o dos reclamos", dijo West.

"En definitiva, estamos hablando de lo que Martin Luther King llamaría revolución –una transferencia de poder de los oligarcas a la gente común de todos los colores–, y es un proceso gradual, democrático, no violento. Pero es una revolución". (FIN/2011)

Estamos Unidos


Soledad Barruti
Desde hace muchos días, sin cobertura en los grandes medios, con la sorna de los comentaristas políticos y una brutal represión policial, pero también con el apoyo de celebridades y periodistas independientes, vecinos, donantes y peatones que se acercan de a centenares, el grupo de jóvenes que decidió ocupar Wall Street para deliberar de manera permanente hasta elevar un petitorio al gobierno no sólo viene creciendo, sino que se ha extendido a decenas de ciudades de Estados Unidos y del mundo y planea una marcha mundial para el 15 de octubre. Esta es la historia (hasta ahora) de ese movimiento que intenta hacer oír al “99 por ciento que no se beneficia con el sistema”.

Mientras las Bolsas del mundo persistían en su psicótica crisis, esta semana se cumplieron quince días del acampe de indignados en las inmediaciones del corazón financiero del mundo: Wall Street. Se trata de cientos de jóvenes que pasaron ahí las últimas noches, y miles de personas con profesiones y necesidades diversas que de día se les unen en asambleas, debates y marchas. Pero si bien la atención está enfocada en lo que pasa en esa calle de Manhattan, lo más interesante es que no están solos. Esta última semana ya suman 66 las ciudades que se plegaron con campamentos propios y protestas diarias, y el movimiento está lejísimos de aplacarse. Con el apoyo de los manifestantes españoles que los inspiraron, también vieron surgir organizaciones espontáneas en Amsterdam, Londres, Atenas, Berlín... Formando una sociedad global de autoconvocados que desde Internet están gestando, en simultáneo y en más de 66 ciudades, una manifestación mundial para este 15 de octubre.
“La economía del mundo es una estafa que sólo beneficia al 1 por ciento de la sociedad, nosotros somos el otro 99 por ciento”, es la proclama que une a estudiantes endeudados y familias que han perdido su casa, trabajadores con frescos telegramas de despido y desocupados hace ya demasiado tiempo, militantes pacifistas que quieren acabar de una vez y para siempre con las empresas militares, inmigrantes que reclaman sus derechos y activistas ambientales que ya no quieren ser cómplices de la destrucción a la que está siendo llevado el planeta.
Con acciones en tiempo real tan vertiginosas como potentes, la breve historia de esto que los más entusiastas llaman el otoño americano (en referencia a la primavera árabe de liberación) casi no apareció en los medios en su primera etapa o apareció como un movimiento absurdo; lo que no significa que, interpretando las acciones parapoliciales, en el centro neurálgico del poder no se los estén tomando bien en serio.

El dia que murio EEUU

 Paul Craig R.
Algunos hemos contado con la llegada de este día y hemos advertido contra su arribo, solo para ser recibidos con abucheos y silbidos de “patriotas” que han llegado a ver la Constitución de EE.UU. como un artefacto que mima a criminales y terroristas y entorpece al presidente que tiene que actuar para protegernos.
En nuestro libro The Tyranny of Good Intentions [La tiranía de las buenas intenciones] Lawrence Stratton y yo mostramos que mucho antes del 11-S el derecho en EE.UU. había dejado de ser un escudo del pueblo y se convirtió en un arma en manos del gobierno. El evento conocido como 11-S fue utilizado para colocar al poder ejecutivo por sobre la ley. A condición de que el presidente apruebe un acto ilegal, los empleados del poder ejecutivo ya no tienen que rendir cuentas ante la ley que lo prohíbe. Por autoridad del presidente, el poder ejecutivo puede violar, sin sufrir las consecuencias, leyes de EE.UU. contra el espionaje de estadounidenses sin mandato judicial, detención indefinida y tortura.
Muchos esperaban que el presidente Obama restableciera la responsabilidad del gobierno ante la ley. En su lugar, fue más lejos que Bush/Cheney e impuso el poder inconstitucional no solo para mantener a ciudadanos estadounidenses en prisión sin presentar cargos, sino también para matarlos sin que sean condenados por un tribunal. Obama afirma que a pesar de la Constitución de EE.UU., tiene autoridad para asesinar ciudadanos estadounidenses de quienes piensa que constituyen una “amenaza”, sin el proceso debido.
En otras palabras, cualquier ciudadano estadounidense que es catalogado como amenaza carece de derechos y puede ser ejecutado sin juicio o evidencia.
El 30 de septiembre Obama utilizó ese nuevo poder hecho valer por el presidente e hizo asesinar a dos ciudadanos estadounidenses, Anwar Awlaki y Samir Khan. Khan era un personaje excéntrico asociado a Inspire Magazine y no venía fácilmente a la mente como una amenaza seria.
Awlaki era un clérigo musulmán estadounidense moderado quien sirvió de asesor al gobierno de EE.UU. después del 11-S sobre maneras de contrarrestar el extremismo musulmán. Awlaki fue gradualmente radicalizado por el uso de mentiras por Washington para justificar ataques militares contra países musulmanes. Se convirtió en crítico del gobierno de EE.UU. y dijo a los musulmanes que no tenían que aceptar pasivamente la agresión estadounidense y que tenían derecho a resistir y defenderse. Como resultado Awlaki fue satanizado y se convirtió en una amenaza.
Solo sabemos que Awlaki pronunció sermones críticos de los ataques indiscriminados de Washington contra pueblos musulmanes. El argumento de Washington es que sus sermones pueden haber influenciado a algunos que son acusados de intentar actos terroristas, responsabilizando por lo tanto a Awlaki por los intentos.
La aseveración de Obama de que Awlaki era algún tipo de agente de al Qaida de alto nivel es solo una aseveración. Jason Ditz concluyó que el motivo para asesinar Awlaki en lugar de procesarlo es que el gobierno de EE.UU. no poseía evidencia real de que Awlaki fuera agente de al Qaida.

Marcha de Indignados NY

 La Jornada
Nueva York, 3 de octubre. Una marcha de zombis, manifestantes de Ocupa Wall Street disfrazados de banqueros y de los muertos vivientes que han generado, dio vueltas por la zona financiera de esta ciudad coreando apesta a dinero, mientras en decenas de ciudades se multiplicaron acciones anti Wall Street. El movimiento ya forma parte de la noticia cotidiana en los medios masivos de Estados Unidos.
Ya en su tercera semana, plantones y acciones de protesta inspirados en Ocupa Wall Street se han extendido por diversas ciudades desde la costa este hasta Hawai, pasando por Boston, Chicago, Los Ángeles, San Francisco y Seattle, pero también en ciudades y pueblos más pequeños como Wichita, Minneápolis, Baltimore, Kansas City y Portland y hasta McAllen.
En Los Ángeles ya se instaló un campamento frente a la alcaldía; en Chicago se ubicó ante las oficinas de la Reserva Federal, y en Boston continúan acciones de protesta contra los bancos. A veces sólo hay decenas en estos plantones, pero muchos llegan a cientos durante las noches, cuando las personas se suman al salir del trabajo y las escuelas. La lista de ciudades que realizan o preparan acciones de Ocupa Wall Street se amplía no sólo en Estados Unidos, sino en Europa y hasta Japón (ver: occupy together). En la lista hay ya hasta un Ocupa Tijuana. La manta desplegada en la Plaza Libertad aquí, Ocupa todo, empieza a ser más que un deseo.
Todos mantienen alguna comunicación o por lo menos intercambian información, ideas y tácticas a través de Twitter, Facebook, YouTube y varios sitios de Internet (ver occupywallst), a través de los cuales se convocó la acción inicial –y muy poco concurrida– el 17 de septiembre. Pero fue al juntarse en el espacio físico y temporal, y no en el ciberespacio, cuando esto empezó a transformarse, y comenzaron a crearse los primeros contactos con organizaciones sociales, sobre todo con sindicatos.
Los medios masivos, desde el New York Times, NBC News, el Wall Street Journal (que ahora tiene su competencia con el diario producido por los de Ocupa Wall Street, llamado Wall Street Journal Ocupado) empiezan a dar cuenta del movimiento.
En su noticiero nacional, NBC News reportó esta noche que el movimiento contra la avaricia empresarial y la injusticia social organiza acciones para demandar un cambio, y entrevistó a un participante que declaró que se trata de una expresión de repudio contra la opresión económica en este país.

10/01/2011

El Imperio por dentro ( 5ta. Parte )

“CAPÍTULO 14
“Biden se había pasado cinco horas tratando de diseñar una alternativa para McChrystal, la cual llamó ‘antiterrorismo plus’. En vez de una cantidad intensiva de efectivos, el plan se concentraba en lo que él creía era la amenaza real: Al Qaeda. Esta estrategia ponía énfasis en la destrucción de los grupos terroristas mediante el asesinato o la captura de
sus líderes. Biden pensaba que era posible disuadir a Al Qaeda de regresar a Afganistán, y así evitar enfrascarse en la costosa misión de proteger al pueblo afgano.
“Biden pensaba que Al Qaeda tomaría por el camino donde encontrarían menor resistencia y que no regresarían a sus antiguos lugares de origen si:
“1. Los Estados Unidos mantenían al menos dos bases (Baram y Khandahar) para que las Fuerzas Especiales pudieran operar en cualquier lugar del país.
“2. Los Estados Unidos contaran con fuerzas suficientes para controlar el espacio aéreo afgano.
“3. Las redes de inteligencia humana dentro de Afganistán le proporcionaban información acerca de los objetivos que serían atacados a las Fuerzas Especiales.
“4. La élite de la CIA, una fuerza compuesta por 3 000 afganos para operaciones anti-terroristas podían moverse libremente.
“Afganistán debía convertirse en un ambiente ligeramente más hostil para Al Qaeda que Pakistán para que ellos decidieran no regresar.
“Obama necesitaba a alguien que lo guiara. Había estado en el Senado sólo cuatro años, y Biden 35. El presidente pensaba que los militares no podían presionarlo, pero ellos podían aplastar a un presidente inexperto.
Biden acudió a Obama, y éste le dijo: ‘Tú eres quien conoces a esa gente. Adelante. Presiona’.
“Obama confesó después que el quería que su vicepresidente fuese un detractor agresivo, y que dijera exactamente lo que pensaba, que hiciera las preguntas más difíciles, porque estaba convencido de que ésa era la mejor manera de servir al pueblo y a las tropas, estableciendo un fuerte debate sobre estas cuestiones de vida o muerte.
“Obama convocó a un pequeño grupo de los más experimentados miembros de su equipo de seguridad nacional para analizar el informe clasificado de 66 páginas elaborado por McChrystal, que en resumen decía que si no se enviaban más efectivos era probable que la guerra terminara en un fracaso en los próximos 12 meses. El presidente agregó que las
opciones en este caso no eran buenas y aclaró que no aceptaría automáticamente la solución propuesta por el General ni por nadie.